Tiempo transcurrido. Crónicas imaginarias (Tezontle - Fondo de Cultura Económica, 2017) es una antología de relatos del escritor mexicano Juan Villoro, donde reflexiona sobre el paso del tiempo y las experiencias que dejan huella en la vida de las personas.
Unidos por la cuestión cronológica y enmarcados en la Ciudad de México –otrora Distrito Federal- la narrativa se centra en un narrador que, al revisar viejos recuerdos de su infancia y adolescencia, se da cuenta de cómo el tiempo ha moldeado su percepción del mundo y de sí mismo.
A través de los fragmentos de su vida, el narrador evalúa cómo los momentos significativos se han transformado con el paso de los años, y cómo, a pesar de que algunos eventos parecen estar perdidos en el tiempo, en realidad siguen marcando la vida del individuo de manera permanente.
Villoro juega con la idea de que, aunque el tiempo parece diluirse, los recuerdos y las emociones que generan esos momentos permanecen, afectando profundamente a las personas. Así nos enfrentamos a la moda, a la política, a la inspiración musical, a la rebeldía adolescente, a lo masivo, a la creencia religiosa, al despertar sexual, a la violencia, todo con una ágil narrativa a ritmo de rock and roll.
Además del buen humor con que aborda las historias, Villoro presenta una enérgica crítica social, a medida que se adentra en los barrios, en las calles, en los retos juveniles, en el enfrentamiento con los adultos o la sociedad en general, todo con un humor que nos permite tomar estas cronologías “urbanas” para descubrirnos a nosotros mismos.
La edición de FCE de acompaña del disco compacto “Mientras nos dure el veinte”, grabado en vivo, con la voz de Villoro y la música de diego Herrera, donde 10 de las narraciones cobran vida en una singular fusión de literatura y rock and roll.
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