Sobre el duelo (Literatura Random House, 2023) es un ensayo breve y profundamente conmovedor escrito por la autora nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie, quien relata su experiencia personal tras la muerte de su padre en junio de 2020, en medio de la pandemia de COVID-19. La autora dice “Me arranca de golpe del mundo que he conocido desde la infancia.” (11) y es lo primero que explica, todo lo conocido cambia, hay una ausencia, inesperada que a veces duele más.
Residiendo en Estados Unidos, Adichie se ve imposibilitada de viajar a Nigeria para estar con su familia y participar en el funeral, lo que intensifica el dolor de la pérdida. “La pena es un tipo de enseñanza cruel (…) Aprendes lo mucho que tiene que ver la pena con el lenguaje, con la incapacidad del lenguaje y con la necesidad de lenguaje.” (14) y qué mayor dolor para alguien que escribe que esa imposibilidad de explicar el dolor que se siente.
Surge entonces una pregunta clave: “¿Cómo sigue funcionando la gente en el mundo tras la muerte de un padre querido?” (25)
A través de una narración íntima y reflexiva, Adichie explora las diversas facetas del duelo: la tristeza profunda, la ira, la incomodidad de las palabras de consuelo y la sensación de desarraigo. Destaca cómo el dolor físico se manifiesta en su cuerpo, con síntomas como un peso en el pecho y una sensación de disolución eterna. “No es sufrimiento meramente del alma sino también del cuerpo, de dolores y falta de fuerzas.” (15)
Más adelante expresa “Es un acto de resistencia y rechazo: la pena te dice que se ha acabado y tu corazón la contradice; la pena intenta reducir tu amor al pasado y el corazón te dice que todavía está presente.” (101)
Además, critica las expresiones comunes de consuelo, como "está en un lugar mejor", que considera presuntuosas e inadecuadas. Explora sentimientos, lanza preguntas y a través de la literatura, va explayando el dolor de la ausencia y el reto de seguir adelante.
Frente a eso, los buenos recuerdos deben y tienen que prevaler. “Los recuerdos concretos y sinceros de quienes lo conocieron son mi mayor consuelo y me conforta que se repitan las mismas palabras.” (39)
A veces parece que el dolor gana y uno no se puede dar el lujo de retomar la felicidad. “Hasta qué punto las risas forman parte de la pena (…) La risa se transforma en lágrimas y se transforma en tristeza y se transforma en rabia.” (17) Más adelante lo confirma: “La felicidad se convierte en una debilidad porque te deja indefenso frente al dolor.” (79) Y es que “La pena cuenta, entre sus muchos componentes atroces, con la capacidad para sembrar la duda.” (102)
Adicihie comenta “Parte de la tiranía de la pena es que te priva de recordar las cosas que importan.” (59) Y es que “Sentarme con él y hablar sobre el pasado era como recuperar un tesoro maravilloso que en realidad siempre me había pertenecido.” (61) Con estas poderosas frases, Chimamanda nos abre su sentir, y a la vez el reto por el cual pasó, las dudas y los temores que la ausencia de su padre ha generado.
Pero la duda debe quedar sepultada. No importa la edad en la que están ausentes, sino cómo somos capaces de recuperarlo y hacerles sabe que el amor por ellos no se termina. “La edad no es relevante para el dolor: no se trata de lo viejo que era, sino de cuánto lo queríamos.” (37)
No solo el amor, sino mantener su recuerdo vivo. “Me asusta esta sensación de una ascendencia que se desvanece, que se me escapa, pero al menos conservo suficiente para el mito, si no para la memoria.” (96)
En 30 viñetas –unas más extensas que otras– profundiza en el aspecto cultural de Nigeria y los igbo, a la cuál pertenecen. Cuando parecía que un funeral no era posible, el dolor se incrementó, en su creencia es como carecer de guía para el más allá.
El estilo narrativo de Adichie es directo y evocador, como lo ha hecho en otros de sus textos, siendo una historia profundamente humana. “Tengo que escribirlo todo ahora, porque ¿quién sabe cuánto tiempo me queda?” (101) Así, este breve texto es un sentir universal, no solo ante la ausencia del padre, sino de cualquier ser que se amó y que hoy está ausente.