lunes, 28 de mayo de 2012

Una aproximación a la poesía chicana: My father was a Toltec

La primera vez que vi este libro, My father was a Toltec (2004) de Ana Castillo, escritora chicana radicada en Chicago, pensé que estaba frente a una novela. Para mi sorpresa, es la reedición de un libro de la década de 1970, que recoge a la vez diversos poemas de su autora.

En el prefacio, Castillo nos evoca al Chicago de la década de 1950, donde su padre -como muchos otros jóvenes de su generación- pertenecía a un pandilla llamada "Los Toltecas" en honor a los ancestros de sus progenitores. Poco a poco, muchos de ellos abandonan esta forma de pensar para adentrarse en "el sistema", trabajos rutinarios para darles una mejor educaciños a sus hijos y a llevar dignamente el pan de cada día.

Después nos invita a reflexionar cómo en la década de 1970 este sentir retoma fuerza, retomando como una expresión cultural el mito de Aztlán, la grandeza de las culturas mesoamericanas, y las grandes tradiciones que en cada casa mexicana se albergan.
Frente a este rescate cultura en busca de una propia identidad, la autora nos comparte que también hay un enfrentamiento frontal: el papel de la mujer, el macho y su labor en el hogar, las convenciones sociales que invitan a la mujer latina a estar en casa y obedecer ciegamente. La libre actuación, el libre pensamiento, el trabajo voluntario e incluso el placer sexual son temas que no pueden tratarse con las generaciones anteriores y que las escritoras de esa época buscarán expresar libremente. 

Con este contexto tenemos una poesía libre, sincera,que combina versos en inglés con otros es español; es como si cada sentimiento buscara su propia lengua para expresarse correctamente. 

El libro se divide en diversos capítulos: The Toltec (donde se presenta el poema que da nombre al texto, una aproximación a la época de su padre y la época que vivió) y un singular poema: Dirty Mexican, aquí, una niña vive el rechazo por su color de piel y su olor, pero que en lugar de deprimirse lo usa como arma para demostrar la grandeza de su cultura. 

Después viene el segmento La heredera, donde el tema de la mujer y la liberta comienza a sugir. llega Ixtacihuatl died in vain, con una remembranza de la leyenda de los volcanes Ixtazíhualt y Popocatepetl que habla, precisamente, del papel tradicional de la mujer, y la muerte en vano que puede tener ante la oportunidad de vivir plenamente.

In my contry parece ser la parte más personal, donde la autora habla desde los poetas chicanos y el marxismo como espera latinoamericana, hasta la reflexión de las diferencias culturales entre un país y otro: uno permite la libertad pero enfrentarse a la soledad, y en otro a la belleza pero también a la opresión machista. 

De aquí desprendo el texto El sueño (67):
"Lucía
mi traje zapoteco
un huipil
rojo
rojo
color de sangre
zapoteca (...)

Lucía mi huipil colorado
por las calles
de una ciudad 
tan orgullosa
tan fuerte
que no sentí 
el primer golpe 
del rechazo."

Women are not roses, The invitation y Otro canto, son otros segmentos donde la autora combina versos compeltos en uno u otro idioma, para reflexionar en los retos de la mujer, las tierras que ha conocido y el amor que se vive entre el café, las cartas y los amantes. De este último desprendo: 

El ser mujer ... (138)
"Mami, dime por favor, si puedes:
Must I be a woman now? I know
I bear the reflection of your youth.
Yet I am no ready to echo those
trying years. One by one 
until the time comes when my
hands are filled with betraying
scars and wrinkles too.
Mami, I'm afriad!
I'm not as strong as you, yet, 
I suppose there was a time
when you did not know your own
streght. You do now. (...)"

Finalmente, la colección cierra con el segmento Five random arrows, los poemas dispersos de la autora, que cierra con la revisión cutlura Our tongue was nahuatl

Con estos leitmotiv, la autora nos invita a reflexionar sobra la mujer, sobre la cultura, sobre el enfrentamiento de épocas y de formas de pensar, sobre el pasado y el futuro, sobre los tabús que se deben romper, y el revaloramiento que cada uno de nosotros desde hacer desde el yo. También a pensar en la filosofía, en la ideología y en las costumbres que nos hacen quienes somos, pero a la vez, cómo nosotros podemos enfrentar y mejorar las tradiciones que nos rodean. 

Después de todo "nos llama algo más grande y amenazante: nos llama la vida." (155).

Años lentos: el rescate de una historia personal y regional



Fernando Aramburo, autor consagrado de novelas y cuentos, nos presenta en esta ocasión una historia singular: la revisión casi infantil de una España en los últimos años del Franquismo y la tierra de Euskadi, ávida de un despetar regionalista.

Años lentos, texto ganador del VII Premio de Novela TusQuets (Colección Andanzas 775, 2012) nos presenta la vida de un niño de 8 años, cuya madre debe dividir a la familia ante la apremiante situación económica de Navarra y el abandono paterno; llendo a vivir con sus parientes San Sebastían, y enfrentándose a una nueva cultura, una que el "navarro" desconoce.

Poco a poco, uno de sus primos que se empeña en aprender euskera, casi sin querer lo va alecionando en la bandera y en el sentimiento regionalista; mientras su prima Mari Nieves se convierte en el chisme de las comadres ante el embarazo probable de uno de tres pretendientes. Un tio trabajador y una tía dominante, complemetan el cuadro de una sociedad tradicionalista, que vive en la región donde Franco descansa cada verano, mientras sus reglas sociales se niegan a modificarse a pesar de la presión juvenil.

Con este contexto, Aramburo regala una novela fresca, juvenil, ligera en su narrativa, pero a la vez profunda en la reflexión: qué puede entener un niño de 8 años ante un embarazo fuera del matrimonio y o la clandestinidad de un grupo de personas que luchan por liberar su patria del yugo fascista.

La narrración es singular: una persona adulta le cuenta al mismo Aramburo sus memorias, permitiéndole que agregue o reste detalles, contando las versiones que de una u otra persona se ha enterado, pocas veces por sí mismo. Tal parece que en lugar de un narrador nos enfrentamos a un narrado deficiente, testigo de muchos sucesos, protagonista de otros pocos.

En paralelo, el mismo narrador Aramburo hace apuntes sobre la construcción del argumento, la calidad del lenguaje cotidiano, aquello que da origen a tal o cual personaje, a la importancia de los detalles o de los dálogos, permitiendo de esta forma que como lectores nos adentremos a los trazos del proceso creativo de la novela.

En 219 páginas, el autor logra una historia redonda, donde sentimos que nos falta mucha información, pero a la vez tenemos suficiente para entender la viviencia de aquellos años que pasan lentamente, como los personajes que envuelven jabones para ayudarse un poco a vivir, o mejor dicho, a sobrevivir.

Novela de misterio, de amor, de pasión juvenil, a la vez ideológica y sociológica, el texto es dinámico y nos permite ir conociendo, desde una mirada aparentemente infantil, la historia de muchos niños españoles, y en sí, de una región que se busca a sí misma en la lengua, en una bandera, en un paisaje, en unos años que prefieren no pasen más.

domingo, 27 de mayo de 2012

Una mirada científica y amorosa: La piel del cielo

Otro texto ganador del Premio Alfaguara de novela, edición 2001, fue La piel del cielo de Elena Poniatowska.

Me declaro un no fan de Poniatowska, intentando con poco resultado la lectura de otros textos de esta autora. Es más, tarde 2 años con el libro en la biblioteca personal, y ahora, aprovechando sus 80 años, decidí leerla.

El detalle narrativo y la vieja escuela mexicana están presentes y dejan un buen sabor de boca.

La novela podría dividirla en tres grandes partes. En la primera, la narración se centra en la familia de Tena, donde los hijos viven felices cumpliendo diversas tareas en la granja familiar. Aquí se reflexiona sobre la capacidad y la inteligencia que tienen los niños, y a quienes la actividad diaria y la sabia orientación de su madre les va dando las herramientas que en la escuela podrían obtener.

En esos capítulo vamos conociendo las regiones rurales de México, la naturaleza en su máxima expresión y la visión casi idílica de lo bucólico.

De pronto, conocemos que esta familia tiene un personaje que todos los domingos va a visitarlos, y que resulta ser el padre, pero uno ausente, catrín, de alcurnia y habitante de la gran capital. Los hijos lo sienten ajeno, pero de pronto el destino los obliga a mudarse a la Ciudad de México, y enfrentarse a la desconocida vida urbana.

Los niños van sobriviendo a las actividades estudiantiles y familiares, para ir creciendo entre los secretos sociales, las apariencias, la sociedad tradicional que se enfrenta a los cambios pos-revolucionarios, y a conocer en realidad quién tiene el poder.

Así comienza la segunda parte de la novela, donde ahora Lorenzo de Tena toma el protagonisto, siendo no solo el más inteligente de los hermanos y el más observador, sino quien se conertirá en objeto del deseo y en un apasiado socialista, al grado de secrificar todo a su alrededor para repartir un periódico con ideas de cambio por todos los rincones del país.

Poniatowska nos presenta entonces profundas reflexiones sobre las diferencias sociales en México de las décadas de 1930 y 1940, para irse adentrando a los desafíos que la cuestión política y económica obliga a´l país.

De Tena se siente todavía vacío, hasta que en la tercera parte de la novela, el protagonista conoce su verdadera pasión: las estrellas. Por azares del destino conocer a los grandes científicos nacionales y con un poco más de suerte viaja a Estados Unidos para convertirse es un promimente astrónomo.

Ahora, el contraste dentre ambas culturas lo darán no solo las mujeres sino la percepción y el desarrollo que a la ciencia se le imprime; también a la convivencia entre las grandes mentes que buscan en las estrellas y en el universo aquello que en la tierra no pueden encontrar: cuál es nuestro origen y hacia dónde vamos.

La novela da entonces un giro narrativo a conocer las deficiencias científicas de México, y a la reflexión de que sin importar las leyes y las promesas políticas,a remarcar las diferencias en las clases sociales y a conocer nuevamente los desafíos que los gibernos mexicanos se niegan a cumplir: la igualdad de oportunidades, la educación, y el desarrollo científico en pro de la población.

Entre una amplia gama de personajes, abundantes descripciones y reflexiones políticas, esta novela se maneja a un ritmo lento. Ciencia, política y amor se combinan para formar constelaciones que van dando forma a la piel del cielo.

Poniatoswka nos deja algunos cabos sueltos, pero demuestra su profundo conocimiento de nuestra idiosincracia y de los miedos que todavía están presentes en nuestra sociedad.

Abril rojo: una mirada al Perú

Retomando la lectura de los Premios Alfaguara de Novela, en Semana Santa leí Abril rojo (2006) de Santiago Roncagliolo.
El texto recibio este importante premio literario en el 2006, presentando una narración ágil, un lenguaje que proyecta el habla popular y la visión de los miedos que parecen revivir diaramente.

En la novela, ubicada precisamente en los días de Semana Santa en una región del interior del Perú, alejada de Lima y de su poder central, el fiscal distrital adjunto Féliz Chacaltana, un ser obsersionado con la legalidad y los procesos, se ve envuelto en unos asesinatos y en la creencia de que Sendero Luminoso está resurgiendo.

Poco a poco, este singular persona que mantiene vivo el recuerdo de su madre al dialogar con ella y separar su ropa favorita, es incapaz de tener una relación social o de relacionarse con otras autoridades. Y de pronto, esta persona que confía ciegamente en la ley, se enfrenta a militares corruptos, autoridades policiacas indiferentes y un singular grupo de "revoltosos" que aparentemente van asesinando a piezas clave de los otrora terroristas.

Pero esto no se termina ahí, Chacaltana también tiene un pasado poco conocido, y el incremento de los asesinatos y el contexto religio que van rodeando a los días santos dan el toque de suspenso y tono policial a la novela.

La narración es ágil, el lenguaje es arrancado de la región peruana, y los personajes complejos, que van dando forma a esta región latinoamericana que podría estar en cualquier país. La línea argumental de pronto se bifurca, por un lago el narrador nos deja conocer reflexiones y diálogos, por otro, una voz narrativa toma la primera persona, y se convierten en intertextos de una singular presentación.

El texto es recomendable y con la invitación a vivir un abril en rojo.

Trilogía del hambre: juegos clásicos y visión moderna

Confieso. Me uní a la literatura exprés. No fue por presión social, o mercadotecnia, o porque "me topé el libro". Una alumna de mi esposa lo leyó y se lo compartió a su papá; su reseña fue convincente: una visión moderna del mundo con un toque realmente clásico. Así que no me resistí; leí el primero (ahora filme) y después tuve que terminar la trilogía.
El libro inicial y que da nombre a la serie The hunger games (2008) puso a leer a jóvenes y adultos con una visión renovada de los antiguos juegos romanos: para mantener y celebrar la unión de un país (Panem) cada año diversos tributos (jóvenes entre 8 y 16 años) se enfrenta a muerte en una arena, donde solo uno podrá ganar para la gloria y la fortuna de su familia.

La perspectiva está interesante: el país resurge de una cruel guerra civil que llevó a la destrucción de un distrito y la sublevación de los otros 12 a la capital. Cada distrito, nos vamos enterando a medida que avanzan los capítulos, tiene una función específica, e incluso llegando a los límites de la mínimo para la sobreviviencia, mientras otros son más privilegiados, siendo la concentración del poder y la riqueza en el Capitolio.

En este futuro, los pacificadores son capaces de restringir la caza o la libre expresión, todo en nombre de la estabilidad y la paz. Sin embargo, esta "paz de los sepulcros" conlleva a la destrucción de familias, a la mutilación de los rebeldes, y al recordatorio anual que los niños y cualquier persona no tienen más valor que aquel que le da el poder.

La paz se ha mantenido por 73 años... hasta que en uno de lo sorteos para el tributo, en el distrito 12 la protagonista será la voluntaria para salvar a su hermana; y dejar a su madre, sus amigos y sus grandes habilidades en busca de la salvar lo único que tiene. El amor, la solidaridad y la confianza serán sus herramientas, haciendo que por primera vez este distrito tenga un posible ganador en muchos años.

Los personajes se van entretejiendo: el presidente omniponente, el creador del juego, los viejos tributos, los enemigos y los aliados, y sin saberlo, los rebeldes.

En sí, The hunger games es un texto ágil que propone un futuro que raya en el fascismo, a medida que la voz del pueblo busca hacerse sonar, y a demostrar que la ciudadanía se construye con una flecha y un ideal: la opresión no tendrá un buen resultado para nadie, y la esperanza reside en quien menos podemos pensar.

La trilogía se complementa con Catching fire (2009) y Mockingjay (2010). En Catching fire nos ubicamos a los pocos días de la primera novela; en Mockingjay conoceremos los límites al que cada persona puede; y la dureza que las decisiones implican en tiempos de guerra y en nombre de la paz.

En realidad, podemos decir que esta trilogía es una unidad bien construida; pues en las partes 2 y 3 son pocos los personas agregados, esto permite ir desarrollando a los protagonistas, y darle forma a esta mundo que vive un un frágil equilibrio.

La narración en los 3 es similar: narración en tercera persona, narrador limitado que permite conocer pensamientos y reflexiones, así como los diálogos; abundancia en descripciones y en segmentos narrativos. Eso sí, una particuliaridad es que todo es visto desde la protagonista, Cat, y desconocemos qué pasa afuera de la arena, en el distrito o en el otro lado del país, siempre será la protagonista quien nos introduce en las situaciones.

En sí, es una trilogía para entretenerse, y una invitación a pensar un poco más no solo en el futuro, sino en el presente.