lunes, 26 de diciembre de 2016

Una mirada a México: El vuelo (Sergio González)

Consagrado periodista, ensayista y narrador, el mexicano Sergio González Rodríguez nos ha regalado grandes ensayos sobre México, y una visión crítica-informativa-reflexiva sobre el fenómeno de las mujeres, especialmente “Las muertas de Juárez”.

En El vuelo (2010) nos lleva a explorar uno de los grandes fenómenos contemporáneos: el narcotráfico.


Con una narración ágil, diálogos precisos, descripciones atinadas y una historia singular, nos presenta la vida de Rafael Asunción Vizcaya, un narcotraficante que vive al día, y que sin querer va escalando en actividades hasta hacerse de confianza de sus jefes. De La Merced pasa a Veracruz, a Panamá, y de pronto de vuelta a su cama, golpeado, confuso, sin ser dueño de sí.

La historia va combinando la aventura de este antihéroe con la revisión de un fenómeno que nace en la década de 1970, pero que en 1990 toma su gran apogeo a raíz de la violencia, el negocio internacional, los colombianos y una red de corrupción que desconoce fronteras, cargos y clases sociales.

¿Qué motiva a estas personas a pasar por esta vida? ¿El trabajo bien pagado, la oportunidad de comprar una casa, el riesgo y la excitación, o la oportunidad de volar?

La traición, el miedo, el negocio, el dinero fácil, la violencia, todo se conjuga en esta historia, una especie de novela negra o novela del narcotráfico, que va explorando los rincones sociales, económicos y políticos del país, nadie se salva, nadie sabe para quién trabaja... ni qué puesto ocupará en el futuro.


Una excelente novela para conocer al autor y a este subgénero que poco a poco nos va arrojando grandes historia. 

lunes, 19 de diciembre de 2016

Misógino – Feminista: El que busca a la mujer, la encuentra

 Es bien sabido que Carlos Monsiváis, en palabras de Octavio Paz, es un género literario. Su mezcla de crónica y narración, su sentido analítico y crítico, la visión que incluye y enfrenta, su enfrentamiento a lo infundado y a los cánones sin sentido, hacen de sus textos una fuente de conocimiento y de reflexión.

Ahora comentaremos Misógino – Feminista (2013), una antología que recorre 35 años de carrera y pensamiento en 20 artículos. De ellos, algunos publicados en la revista Debate Feminista, y otros publicados en otros espacio.

Esta antología, para quien le gusta profundizar en el sentir de la mujer, de esa figura emblemática de nuestra cultura, es perfecta.

En sí los textos, presentados en orden cronológico, son construidos con el sentir de Monsiváis: datos duros, observaciones críticas, punzadas de humor y cinismo, que se combinan con reflexiones que nos permiten decir ¿es lógica la devoción hacia la mujer – la esposa ante la amante – el sentir de la patria?

Con su erudición, este autor mexicano nos lleva al cine, a la literatura, a la televisión ¿qué papel han jugado estos medios en la mitificación del papel de la mujer en la sociedad mexicana?

Otros artículos exploran el inicio de la lucha feminista, la historia del voto, las jóvenes – las esposas – las madres, incluso su repercusión en la política y en la constitución de la familia mexicana.

Destacan a mi gusto dos grandes revaloraciones: Rosario Castellanos y Frida Kahlo. La primera, por ofrecer una visión diferente de la autora chiapaneca; la segunda, por el recuento histórico de esta figura que pasó de ser la esposa de Diego Rivera, a pintora, a icono cultura, a símbolo pop del feminismo.

También pone en la mira dos figura del feminismo: Nancy Cárdenas, que sin escandalizar apoyó las causas de la minoría, aun a costa de su propio sentir. Susan Sontag, aquella escritora que logra elevar el SIDA a pandemia y a una revisión del dolor de otros. Ambas mujeres, ambas grandes pensadoras.

Entre las temáticas que se trabajan a manera de ensayo no pueden faltar los grandes temas de nuestra sociedad: la homosexualidad y el lesbianismo, el aborto, la religión, el mundo del siglo XXI y, claro, cómo en México tal o cual postura sigue generando debate, sentimientos encontrados, miradas y chismorreos, y ante todo, críticas y señalamientos.

Lo cierto es que encontrar a una mujer es tarea fácil. Son más de la mitad de la población mexicana. Pero tener una actitud de iguales y, en especial, de lucha para que sea igual, no lo es. Este texto nos lleva, precisamente, a reflexionar sobre los extremos de la misoginia y del feminismo: opciones encontradas que buscan un término medio.

Cada texto es una época, una visión, un tema a debate. Y curiosamente aquellos de 1973 o 1978 lejos de estar perdidos en el tiempo, son perfectamente vigentes. ¿Hemos evolucionado? Me atrevo a decir que poco.


Estamos rodeados por mujeres, diría como hombre, felizmente rodeado por ellas. Y que cada uno sea parte de la integración y la valoración adecuada de la mujer. No es solo una moda, es realmente una obligación para nuestra sociedad y cada uno de nosotros. 

lunes, 12 de diciembre de 2016

En la búsqueda de la mujer completa: Monólogos de la vagina

En el 2005, en una de esas visitas a la librería, nos topamos con un afamado texto llevado al teatro: Monólogos de la vagina (2004) de la autora norteamericana Eve Ensler.

Un texto corto en extensión, enorme en contenido. El libro, publicado originalmente en 1998, recopila fragmentos de entrevistas, interpretaciones de conversaciones y algunas narrativas de ficción, para hacer reflexionar sobre la evolución de la mujer, o, mejor dicho, del sentimiento de ser mujer.

En su prólogo, Gloria Steinem habla de la generación “de ahí abajo”, y la misma Ensler señala, en contraparte, las 128 veces que dice en la obra “vagina”. Entre ambos textos, identificamos ese tabú de la palabra “vagina”, y con ello, la carga ideológica que la sociedad netamente regulada por hombres ha dado.


Los texto, hay que reconocer, manejan un ritmo trepidante: algunas veces para reírse, otras para burlarse, las más para reflexionar, el libro nos presenta situaciones tan comunes como el descubrimiento de esta parte del cuerpo, el vello, las verdades sobre la vagina, y en especial, las visiones que diferentes generaciones tienen sobre ella.

En otras ocasiones, las respuestas a preguntas hechas a muchas mujeres nos sorprenden continuamente: si la vagina se vistiera, qué prenda usaría; si pudiera hablar ¿qué diría?

Y en medio del humor o del sarcasmo, la autora se atreve a hablar de las vejaciones, las violaciones, las guerras y el sentir de la mujer como un objeto al servicio de otro.

Habla también de los amores: hacia los hombres, hacia las mujeres, y en especial, hacia sí misma.
Con ese lenguaje que puede ser soez y que puede ser lírico (como las respuestas de una niña a las preguntas realizadas), el texto se convierte en un manifiesto: una palabra no define a la mujer, es un contexto social e individual el que le ha dado valor o desvalor a una palabra, y por ello a la mujer misma.

¿Un monólogo que pierde vigencia? No, en ningún momento. Por el contrario, al escuchar nuevamente las problemáticas y las situaciones indignantes que vive una mujer en nuestra sociedad, este texto nos invita a ser empáticos, a conocer lo desconocido, a reírse de nuestros propios tabús, y en sí, a revalorar y a apoyar a las mujeres.

Se trata entonces de hacer un diálogo, ya no de hombres y mujeres, sino de iguales.
¿Hay que leerlo? ¡Por supuesto! 

lunes, 5 de diciembre de 2016

A la búsqueda del ser: Alejandra Pizarnik, Prosa completa

De Argentina han salido grandes escritos. Muchos de renombrada fama mundial: cuento, novela, poesía, teatro, narrativa. Y de entre ellos se reconoce el aporte de Alejandra Pizarnik. Más reconocida por la fuerza de su poesía, en esta ocasión comentaremos una antología difícil de conseguir: Prosa completa (2012)

El libro lo conseguí gracias a que un amigo, un buen amigo, un buen y excelente amigo, estuvo preguntando y lo encontró en una librería. Como el sentir de su autora, presenta rajaduras, maltrato por el tiempo, mas con un contenido inigualable.

El prólogo, presentado por Ana Nuño hace un breve recuento de la autora y de los textos que nos vamos a enfrentar.

Confieso que tarde un lustro en terminarlo, una mudanza y muchos libros en medio, pero contento por haber concluido el desafío.

Pizarnik, a fin de cuentas, es una lírica nata. Su prosa está cargada de significados y de recursos líricos, y su manejo del lenguaje le lleva a inventar palabras y formas de expresión. En esta antología incluye las partes Relatos, Humor, Teatro, Artículos y ensayos, Prólogos y reportajes, y en cada uno hace gala de temas y humores propios de su narrativa.

En los relatos, muchos de ellos breves, se habla de temáticas como la devoción, las palabras, los diálogos, las relaciones entre parejas, y algunos de fragmentos que por azares del destino fueron publicados y otros únicamente escritos a mano y guardados en cualquier cajón de la casa.

En teatro, se incluye la pieza de un acto “Los perturbados entre lilas” donde cuatro personajes nos recuerdan a Ionesco y situaciones entre absurda y comunes de nuestra vida diaria.

En los artículos, Pizarnik también aborda revisiones a Historias de Cronopios y de Famas, de Cortázar; también un prólogo a la antología consultada de la Joven Poesía Argentina.

Estamos ante una antología variada, llena de retos lectores y de cuestiones por descubrir. Vital para entender a la autora e indispensable para entrar en esa mentalidad laberíntica de la argentina. 

lunes, 28 de noviembre de 2016

Dylan desde dos miradas: (2) Adiós a Dylan

La mirada, el cigarro, la filosofía, lo cotidiano... todo se conjuga en una fotografía de Bob Dylan. Y claro, en sus canciones, que han marcado generaciones en busca de identidad y una forma diferente de ser, de rolar.

En este sentido, Alejandro Carrillo logra construir en Adiós a Dylan (2016) una especie de viajé iniciático, donde el héroe se enfrenta al amor, enemigos reales, una sociedad que lo apremia, aventuras en el camino y, por supuesto, canciones de Dylan.

Omar, de 19 años, es todo un conocedor del canta-autor norteamericano. Vive en la Ciudad de México y un día, por esos azares del destino que una puede tener, se enamora. Con ello descubre las emociones pasionales, pero también las mieles del dolor.


Se lanza entonces a cumplir su sueño e ir a un concierto del autor, pero sin dinero y un medio fijo, la aventura del héroe tomará tintes épicos.

Haciendo gala de un profundo conocimiento de las letras y las versiones ocultas casi desconocidas de sus canciones, nuestro héroe se topa con grupos de fanáticos –de los bueno y de los no tan buenos- para ir conociendo las actitudes de su familia y del propio amor propio.

¿Rodará como una piedra? En todo el texto sí. Con una narrativa ágil, donde siempre está pasando algo, diálogos fluidos, personajes trazados de manera casi filosófica –como una canción de Dylan, el texto va dejando un excelente sabor de boca.


Ganadora del Premio Mauricio Achar Literatura Random House 2016, la novela es un buen viaje iniciático de la juventud y, por supuesto, de quienes queremos conocer más sobre la mítica del ahora reconocido Premio Nobel de Literatura. 

lunes, 21 de noviembre de 2016

Dylan desde dos miradas: (1) Tarantula

Bob Dylan obtuvo, para asombro de muchos, el Premio Nobel de Literatura. No por su narrativa, sino por el valor de sus canciones que, de acuerdo con la Academia Sueca y de muchas personas alrededor del mundo, han logrado retratar generaciones enteras frente al sueño americano y el hastío de la sociedad moderna.


En papel hay dos obras de este canta-autor-poeta: Crónicas y Tarantula (2005)

Ésta última, escrita originalmente en 1966, es un conjunto de textos narrativos y poéticos que contienen la fortaleza sentimental y crítica de Dylan: desde un abogado que se enfrenta a situaciones corruptas, hasta jóvenes que busca salirse el apremio social, los textos narrativos breves retratan el lenguaje y el sentir de una generación.

A cada texto le acompaña una carta o una poesía, con temas tan diversos como el amor, el dinero, el compromiso y mucho, mucho más.

Escritas a manera de corriente de consciencia, las narrativas carecen muchas veces de puntuación y de mayúsculas, lo que convierte al texto en una verdadera red de ideas y sentimientos, que hay que desenmarañar para entender. Obliga, por ello, a prestar especial atención a los personajes, las situaciones y las reflexiones profundas que el autor de “como una piedra rodante” puede hacer.

A veces, las situaciones más comunes detonan una lírica normal, casi adolescente:
“dear tom
have i ever told you that i
think your name ought to be
bill. It doesnt really matter
of course, but you know, I like
to be comfortable around people.” (32)

La necesidad de estar con la persona amada, también se convierte un tema para Dylan. Aunque se tache de locura o de malestar:
“& everybody’d just look at me funny
for living with a crazy woman.
perhaps if I bought her her own car,
It would help/ can you fix it?” (35)

Además, algunos textos combinan incluso inglés y español, como un reflejo de este afán de romper una barrera cultura e ir hacia lo místico de lo mexicano. “DOS PASOS MAS ee & crazy ALLA LUEGO UN RAYO & insane DE SOL & taking the brothers to bed & to boredom...” (41) ¿Importa la narración? Realmente no, solo expresar el sentir.

La música, la guerra, el trabajo, la estructura familia, el sexo, el cuerpo, los estimulantes, el cáncer, el campo, el fastidio a lo común, el alcohol, todo se convierte en leitmotiv durante los textos y las poesías.

Y por supuesto, la crítica hacia el propio sistema que carcome: “the united states is Not soundproff – you might think that nothing can reach those tens of thousands living behind the Wall of dollar – bur your fear Can bring in the truth ...” (64) ¿Todavía vigente? Por supuesto.

Ante todo, diría Dylan, hay que estar contentos consigo mismo, invitano a la valoración de cómo es uno mismo, sin importar lo que está alrededor:
“why are you so frightened of
being embarrassed? You spend a lot of
time on the toilet ont you? why
dont you admit it? Why are you so
embarrassed to be frightened?” (70-71


Un texto difícil de llevar, que involucre una participación total del lector. Para entender a Dylan y, por qué no, a una generación rebelde, que puede romper esquemas y vivir al máximo. Poco a poco, uno va entendiendo el pensar de Dylan, y sin querer, quedas atrapado en esta telaraña. Y ya quieres ser una tarántula en esta visión. 

lunes, 14 de noviembre de 2016

Un sueño de Bernardo Reyes, un héroe, una historia del México Revolucionario



Ignacio Solares ha escrito diversas novelas históricas, siendo una de sus áreas los grandes personajes de la revolución o la posterior a ella. En Un sueño de Bernardo Reyes (2013), retoma a un singular personaje del norte del país: gobernador fiel a Porfirio Díaz en Nuevo León. 


Considerado como un renovador, pacificador, y con una gran visión de desarrollo, el estado logró crecer posiciones a nivel nacional hasta convertirse en uno de los pilares industriales. Fiel a Porfirio Díaz, pero ante todo un noble soldado, conservó ese rigor de las armas leales a la Patria hasta sus últimas consecuencias.

Por su trascendencia, respetado por oficialistas y revolucionarios, logró una transición pacífica en el norte, hasta que, en sus pensamientos, Madero ni su grupo podrían sobrellevar a la nación hacia un mejor futuro. Lo que habían luchado estaba enmarañado en la burocracia y una falta de visión de Estado.

Entonces, en una decisión de asombró a propios y extraños, se alzó en armas. Un desenlace trágico que uno de sus hijos vivió en carne propia y, Alfonso, recrearía en diversas poesías posteriormente.

La novela se conforma de 20 capítulos cortos, llenos de referencias y citas que nutren un relato histórico, con reflexiones del propio Reyes y uno de sus hijos. Al ritmo adecuado, va explorando la vida y obra de este personaje, hasta llegar a la pregunta ¿qué hubiera pasado si el levantamiento de Bernardo frente a Madero hubiese triunfado?

Una novela corta pero atinada, que permite conocer el estilo del autor, y a la vez, explorar una de las personalidades de nuestra historia, una persona que representa el valor ante la Patria, la importancia de la lealtad en las armas, y cómo el país debe construirse con base de sueños y de realidad.

lunes, 7 de noviembre de 2016

El asedio, el quiebre de la España Imperial



Arturo Pérez-Reverte es uno de mis autores favoritos. Ya sea como novelista o como ensayista, posee una facilidad de palabra que te atrapa y a la vez te invita a la reflexión y la propia mirada. Lo conocí en el Club Dumas, y lo llevé al máximo con la serie de El Capitán Alatriste. 


Ahora hablados de El asedio una extensa novela que retrata dos grandes historias: cómo Cádiz es uno de los puertos más importantes de la península, rodeado por los barcos de Napoleón durante la invasión francesa; y una serie de asesinatos de mujeres jóvenes que, poco a poco, van también cerrando las murallas invisibles de la ciudad. 

Enmarcado en el momento histórico de la Constitución de Cádiz, la novela presenta un sin de personajes, donde destaca el capitán de policía –casi corrupto, casi salvaje, pero vivaz y con la experiencia para desenmascarar al asesino-. También nos presenta a los comerciantes, donde una mujer tiene que romper los parámetros de su época para llevar el negocio familiar y vigilar la compra-venta de mercancías de las colonias y, con un poco de piratería (corrijo, de permiso de corsario) mejorar la apremiante economía.

La novela, que a ritmo lento desarrolla el frente español y el frente francés, van haciendo un rico diálogo entre los enemigos, que incluso pueden colaborar para romper el cerco o atrapar al asesino.
Con múltiples descripciones y ese lenguaje característico que lo caracteriza, las más de 700 páginas van haciendo el recorrido de la muralla, de las defensas y de los seres que no dejan mermar por un asedio, al contrario, ven la oportunidad de crecer, no queda claro si por la corono o por ellos mismos.

Una excelente novela para disfrutar, una visión histórica que entre estocada y plomazo, siguen vigentes en nuestros países. Claro, si les gusta la novela histórica, estamos ante un excelente ejercicio. Solo que hay que saber vivir el ritmo del texto, casi como esperar el oleaje perfecto en altamar.