sábado, 4 de febrero de 2012

La revísión de un clásico: Mientras agonizo

Se habla mucho de William Faulkner, escritor norteamericano que recibió el Premio Nobel de Literatura en 1950. Sureño de vida, la vida es esas tierras es eje de una buena parte de sus obras. Pero no solo como anecdatorio, sino como la reproducción de una tierra en decadencia, de un lenguaje coloquial que se funde en los convencionalismos, de personajes entrañablemente humanos.

Mientras agonizo (1930) es un texto que tiene estos elementos: la revisión de una región entre montañas y ríos, que es devastada con una lluvia o que renace con el trabajo arduo de sus habitantes.

La anécdota es aparentemente sencilla: una esposa yace en su lecho de muerte y de pronto, su familia se reúne. Al morir, el esposo decide llevarla a su tierra natal, donde todavía tiene parientes, a pesar de la negación de su familia, de sus vecinos, e incluso de una lluvia torrencial que ha desbordado ríos y tirado viejos puentes.

En este marco, los personajes van a pareciendo uno a uno: el padre, obstinado y tacaño; el hijo mayor, aparentemente de facultades mentales limitadas; el hijo querido y evade sus responsabilidades; la hija, aparentemente en arapos y reservada. Y ente ellos, mientras agoniza, la madre que intenta recuperar su pasado.

También aparecen los clásicos personajes sureños: el médido, el pastor, los granjeros, los ganaderos, los charlatanes, los vecinos atentos a esta familia disfuncional; todo tienen una característica única.

El texto de Faulkner no se limitará a ser una revisión histórica del sur de la posguerra de secesión, con un magistral ritmo narrativo, va modificando sus líneas temporales, recreando diálogos familiares e incluso los pensamientos de aquellos que no deberían emitirlos. También va nombrando a capítulos pequeños según su punto de vista, de tal forma que el lector está obligado a tener un papel activo de identificación y ejercicio literario.

Poco a poco, reconocemos que no es solo una familia que lucha por comer día a día, sino que guarda secretos de amor / entrega, resignación / deseo, ignoracia / crueldad, vanidad / desprecio, todo va tejiendo una complicada red de sentimientos humanos.

Y mientras agoniza una mujer, tal vez una sociedad también lo hace.

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