El título de la novela de Agnès Martin-Lugand me atrapó
desde que vi el libro. Coincido: leer y tomar café te hace feliz. La gente
feliz lee y toma café (2014) es un texto de una novel escritora francesa, que
cansada de ir con las editoriales se autopublica en un portal electrónico y se
convierte en un éxito de ventas. Esto lleva a que las editoriales “establecidas”
finalmente se decidan a publicarla. Y el éxito fue mayor.
La novela es un texto sencillo, con pocos pero personajes
significativos. Su anécdota es aparentemente sencilla: una mujer de mediana
edad pierde a su pareja e hija en un accidente, y esto lleva a que Diane se
enfrente a una profunda depresión. Su mejor amigo, y ahora administrador del
café que da nombre a la novela, trata de despabilarla y le propone abandonar París
y salir a la vida.
Diane un día, sin mayor reflexión, decide irse a Irlanda. Y ahí
comienza la aventura.
Lo interesante del texto es cómo la protagonista se enfrenta
el duelo, a la negación y, finalmente, a la decisión de enfrentar sus medios.
Los diálogos abundan, las reflexiones sobre aquello que nos
hace felices o que le damos la debida importancia, se presentan en una forma
común. No hay técnicas narrativas experimentales ni de difícil comprensión, lo
que sí hay es una historia humana, que se deja leer en un par de días.
Tal vez cae en algunos clichés como el antagonista masculino
y una vecina animosa, e incluso algunas situaciones poco verosímiles, pero
dentro de la ficción son válidas para invitarnos realmente a pensar: la
depresión está en cualquier y bajo diferentes circunstancias, también afectando
en forma diferente a quienes la padecen.
Un texto interesante que ya tiene “secuela”…
Mientras tanto, a leer y a tomar café, que nos puede hacer
muy feliz.